Para conocer realmente la gastronomía chilota, lo ideal es visitar lugares típicos como el Mercado Central, Feria Artesanal y Festival Costumbrista de Castro (febrero). Y también, restaurantes y “picadas” (restaurantes pequeños), ubicados en toda la isla. En todos ellos los protagonistas siempre serán los pescados, mariscos y papas, cocinados de distintas formas.
Entre los restaurantes, destaca Sabores de mi Tierra, ubicado en un palafito de Castro y con una vista impresionante. Su especialidad es el curanto y también podrás degustar todo tipo de preparaciones con mariscos, como pulpo al ajillo o locos mayo; caldillos y mariscales; o el típico cancato de salmón.
Las famosas Cocinerías de Dalcahue -a 25 km de Castro- son otro imperdible. Se trata de unos 20 “puestos” de comida o cocinas, ubicadas en una gran estructura tipo palafito, que asemeja un barco. En todas ellas podrás observar la cocción y preparación de platos como cazuela chilota, paila marina, pescados, asados, papas rellenas, empanadas o curanto. Luego de elegir tu cocinería, no esperes sentarte en las típicas sillas y mesas de un restaurant tradicional, sino en grandes barras con sillas de madera alrededor de las cocinas y en los extremos del lugar.
Y si estás en Chiloé, no puedes dejar de comer sus grandes y sabrosas ostras, tanto al natural como en sus diversas preparaciones. En la Isla de Quinchao puedes visitar Ostras Los Troncos, famoso restaurant ubicado específicamente en Curaco de Vélez; que además de ostras, cuenta con comidas típicas de la zona.
Y en Achao, también en la isla Quinchao, vale la pena visitar su costanera, donde encontrarás una serie de restaurantes con rica y típica comida chilota, tales como como Don Pablo, Mar y Velas, Mercado, Sabores de Coñab, hostería La Nave y La Casona.